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Por qué la tragedia de Once es la mejor radiografía de la Argentina

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UNA PERFECTA DEMOSTRACIÓN DE LA REALIDAD
UNA PERFECTA DEMOSTRACIÓN DE LA REALIDAD

Según el diccionario de la Real Academia Española, una de las acepciones de la palabra radiografía es “descripción o análisis detallado”, y cita como uno de sus ejemplos lo siguiente: “Una excelente radiografía social de la época.”

 

Después de la tragedia de Once, se han escrito, dicho y expuesto innumerables notas cargadas de datos y cifras que, en muchos de los casos, la mayoría se conocían o, por lo menos se intuían.

No es necesario que se mencione que el servicio ferroviario en la Argentina es paupérrimo, excesivamente costoso (para el Estado) y deficitario. Ni tampoco es una novedad que las empresas concesionarias de todos los ferrocarriles, no solo el Sarmiento, no cumplen con sus obligaciones contractuales amparados por quienes deben realizar el contralor, o sea, el Gobierno Nacional, a la postre, cómplice de todas las irregularidades habidas y por haber.

Cabe señalar que esta complicidad no es solo atributo del gobierno kirchnerista, pero sí es necesario decir, ya casi de forma obligatoria, que los gobiernos de Menem y los de Kirchner y su esposa, son los máximos responsables, por obvias razones.

El primero, por la desastrosa privatización —como absolutamente todas las que se realizaron en su mandato— y el kirchnerismo, por la entrega millonaria y descontrolada de subsidios. Los hechos están a la vista.

Si bien ya mucho se ha dicho sobre el tema, es necesario reflexionar sobre algunos hechos puntuales que arrojan como resultado final una visión de nuestra realidad social, y por qué no, política y económica.

Las declaraciones del Secretario de Transporte Juan Pablo Schiavi: “Si pasaba ayer, no era tan grave”. En realidad, esta frase no resiste el menor análisis. Solo puede llegarse a una conclusión. O este señor es un perfecto inútil o un perfecto hipócrita. No hay otra posibilidad. Ahora, ¿de quién es la responsabilidad de que este señor ocupe ese lugar? Del gobierno nacional. Punto.

Las declaraciones de uno de los hermanos Cirigliano, dueños de la empresa concesionaria: “Creo que el servicio que brindamos es aceptable”. Al igual que Schiavi, o es un perfecto inútil o un perfecto hipócrita. Tampoco hay más opciones. Y al igual que en el caso anterior, ¿quien es el responsable de que la empresa TBA siga administrando el ferrocarril? Del gobierno nacional, ya que hasta antes de esta tragedia hubo muchísimas irregularidades —más que suficientes— como para sacarles la concesión.

El Estado nacional se presentó como querellante. Tampoco esto resiste ningún tipo de análisis, puesto que el mismísimo Estado Nacional es el responsable de entregarle al concesionario el millonario subsidio y el control del servicio a través la CNRT (Comisión Nacional de Regulación del Transporte de Argentina).

 Esto demuestra también, que el Gobierno Nacional está conformado, en líneas generales, por perfectos inútiles o perfectos hipócritas.

 Pero hay algo más. La presidenta desapareció, literalmente. ¿Como se explica que la primera mandataria no pronuncie ni media palabra sobre semejante tragedia? Es muy simple; o la Señora Presidenta es una perfecta inútil como para ocupar el cargo para el que fue electa o es una perfecta hipócrita.

Después de dos días apareció el cuerpo sin vida de Lucas Meneghini. Y en este hecho puntual, en sí mismo, se debe realizar un análisis bastante más profundo, ya que este mismo episodio podría demostrar varios de los puntos anteriores

Una demostración clara de cómo se viaja y cómo funcionan los trenes, ya que el joven ingresó al tren por una ventana.

La precariedad de los encargados del rescate. Y en este punto es necesario aclarar que el rescate no es algo que le incumba al SAME que, dicho sea de paso, fue lo único que funcionó bien, y es necesario aclarar, también, que desde los medios oficialistas intentaron responsabilizar al SAME de no haber encontrado antes a Lucas.

Los helicópteros utilizados para el traslado de víctimas, que fueron cedidos de forma gratuita, son de la empresa Módena, cuyo máximo responsable es el presidente de Fiat Argentina, Cristiano Rattazzi.

 Más allá del trato “descortés” por decirlo de una manera suave, que le brinda el Gobierno al señor Rattazzi, ¿Cómo puede ser que el Estado no cuente con helicópteros para este tipo de situaciones? Eso sí, tenemos una empresa aérea de bandera, Aerolíneas Argentinas, que es lo más parecido al funcionamiento de los ferrocarriles —con la salvedad que en este caso el responsable directo es el Estado— que le cuesta millones y millones de dólares anuales, pero no tenemos helicópteros para catástrofes.

Como se puede apreciar, hay una serie de hechos claros, concretos e irrefutables de lo ocurrido. Hechos que no contienen grises ni claroscuros, hechos que se sufren y padecen a diario por casi todos los argentinos; en realidad, la mayoría de los ciudadanos comunes, los que se levantan todos los días para ir a trabajar pendientes de un presentismo para que no se vea deteriorado aún más su magro sueldo, al que después se le quita un 40% de impuestos que termina yendo a esos mismos subsidios que solo sirven para beneficiar a unos pocos. Subsidios a veces muy ridículos, como el de casi mil millones de pesos anuales destinados a financiar el Fútbol Para Todos. ¿Cuantos vagones de trenes se podrían fabricar con ese dinero y cuantos helicópteros se podrían comprar?

Pero el gobierno nacional decidió que es más importante gastar el patrimonio de todos y todas en subsidiar a amigos del poder, en lugar de invertir en transporte, salud, seguridad o educación.

Tal vez sea necesario plantearse qué hubiese pasado si el choque del tren contra el muro de contención, en lugar de haber ocurrido en Once, hubiese ocurrido en la otra punta, en la Estación de Moreno, en el horario de las seis de la tarde cuando la misma cantidad de gente vuelve, en lugar de ir.

 Seguramente, la cantidad de víctimas sería casi la misma, pero ¿quién se hubiese encargado de atender clínicamente y brindar auxilio médico a todas esas personas siendo que en la Provincia de Buenos Aires, como en el resto del paí,s no existe el SAME?

 ¿En que se hubiesen transportado a los heridos cuando fuera de la Ciudad de Buenos Aires pedir una ambulancia y que llegue es casi un milagro?

 ¿Quién se hubiese encargado del rescate y socorrer a los accidentados? ¿La Policía de la Provincia de Buenos Aires, los bomberos voluntarios? Sin ánimo de ofender a nadie, pensar solo en esto causa escalofríos.

 Y por último, ¿a qué hospitales hubiesen sido derivados los accidentados cuando el conurbano bonaerense carece de una infraestructura sanitaria notable, y que la inmensa mayoría de las personas que viven en el Gran Buenos Aires se deben trasladar hacia la Capital Federal para acceder a un hospital público?

 En fin, podría decirse que fue “una desgracia con suerte”, si es que se puede decir que existen. La suerte fue que la tragedia ocurrió en la Ciudad de Buenos Aires, y no en la Provincia, cosa que no ocurrió solo por obra y gracia de la casualidad, nada más que eso.

 Y como si fuera necesario algún otro detalle, algo así como “la frutilla del postre”, el sitio Clarín.com publicó un artículo donde muestra que una unidad motriz y otra remolcada de una formación doble piso del Sarmiento permanecen retenidas en Tecnópolis desde diciembre por la Secretaría de Transporte de Juan Pablo Schiavi y la Unidad Bicentenario a cargo de la Oscar Parrilli, secretario general de Presidencia.

 La empresa TBA solicitó sin éxito en dos ocasiones la devolución de los vehículos para acoplarlos a otros siete coches remodelados que pertenecen a un tren doble piso que se encuentra listo para circular.

Según los datos obtenidos por Clarín, "los funcionarios no autorizan el retiro porque quieren asegurarse la presencia de los coches para la nueva edición de Tecnópolis que abrirá en cuatro meses". Algo verdaderamente increíble, pero real.

 Todo esto demuestra, lisa y llanamente, de qué se trata el tan mentado modelo. Despilfarrar a diestra y siniestra, aunque en realidad, el despilfarro es muchísimo mayor para la siniestra que para la diestra. Se entiende, ¿no?

La tragedia de Once es más que una mera demostración de la realidad. Dicen que una imagen vale más que mil palabras, pero evidentemente, una radiografía vale más que mil imágenes, y este es el caso más gráfico que puede tenerse de nuestra realidad.

 
 

44 comentarios Dejá tu comentario

  1. SOS IMPRONUNCIABLE OBTUSA FRIJOLERA ! Resulta que la asociación entre El Grupo Cirigliano y los funcionarios K están casi a la luz pero igual somos gorilas, trolls, antis, etc. Ahora resulta que CKF es ingenua y no está al tanto de la situación de TBA ni de la causa ni del estado de los trenes. BOBA CHORIPANERA !!!!!!!!!!!

  2. Pisando los 70 pirulos he visto y vivido unas cuantas y creo ser un buen testigo de la decadencia argentina. Que para mi empezó en los '70, desde ahí caímos en picada hasta el crisón del 2002, en el cual "pareció" que tocábamos fondo y de ahí hasta ahora nos venimos arrastrando por éste, sin levantar realmente. Los '60, que a mi me agarraron ya adulto, fueron buenos(muy buenos si los comparamos con lo que se vino) especialmente en lo económico, pero lo político era un volcán contenido. Que estalla cuando los milicos(Onganía y Lanusse) no resisten la presión de la Guerra Fría, que se había colado en Sudamérica con Cuba y le tratan de pasar el fardo a los peronchos y AHÍ SE PUDRIÓ TODO. Perón se muere y la completa. El "rodrigazo", el primer gran ajuste(frustrado) de la economía argentina inauguró estos, luego los tuvimos cada 10 años hasta el tremebundo AJUSTÓN del 2001, "exitoso" en principio, pero no se si suficiente para revertir la tendencia. Los '70 fueron lo peor de lo peor(todos los males juntos). Los peronchos en el "poder"('73-'76) lo pudrieron todo(ahora se hacen los dolobus, por supuesto y se "olvidan" de lo que hicieron). Lo cual sirvió de excusa para que nos tomaran de conejillo de indias con M. de Hoz, para el "modelo" que el Imperio, 15 años después(en los '90) estableciera para todo el mundo: el fin del "proteccionismo" y "la sustitución de importaciones" y el aumento del comercio y el desarrollo de China y los emergentes de esa zona. La subversión y la represión de los '70, se escapó a todo control DE AMBOS LADOS, lo que realimentó la tragedia, que en un contexto económico desfavorable, profundizó todos los males y a fines de los '90 cuando asume el cotur ya estábamos en la lona total e irreversible. La absurda "deuda externa" que ya era impagable en el '83 cuando asume el Alfonso, creció mucho más con éste y fue la excusa para la liquidación total del "modelo" que Perón instauró en el '46, tremendamente exitoso hasta los '70 y que ahí empezó a caer. El cotur si se quería mantener en el gobierno no tenía otra posibilidad, que hacer lo que hizo. Ni bien asumido se fue a la embajada yanki y les dijo: muchachos Uds. manejen la economía que saben hacerlo, yo me ocupo del chusmerío interno. Justo el mundo había cambiado con la implosión soviética, con eso se terminó la 3era. posición de Perón, porque ya no había más 2da., sólo el Imperio yanki. Y el cotur se alineó con estos más allá todavía de lo que estos pretendían(la "relaciones carnales"). En una sola cosa no los contentó: no quiso romper las muy buenas relaciones con Irán heredadas del Alfonso(Guerra Fría) que incluían ingentes ventas de armas(y sus cometas, por supuesto). Y ahí tuvimos EL 1ER. MENSAJE en el '92: la auto-voladura de la emba de Israel. A pesar de las INSTANTÁNEAS FALSAS ACUSACIONES a Irán de israelíes y yankis el cotur se negó a romper con ellos y encima estrechó más las relaciones. Y ahí se vino EL 2do. MENSAJE más alevoso y en UN BLANCO TOTALMENTE ARGENTINO: la AMIA, que dejaba claro que el 3ero. sería en la Rosada y con él adentro. No hizo falta, hocicó y finalmente rompió con Irán, pero no del todo porque los persas no se resignaron a perder a un país amigo y han hecho todos los esfuerzos en ese sentido, que han dado frutos el año pasado, cuando "el gobierno" pingüinesco ha aceptado una negociación con ellos para revisar la falsa acusación de Nisman. Un tanto reduccionista, pero no muy desacertado, creo. Estabamos bien e ibamos bien pero precariamente.

  3. Buen articulo y comentarios de Petrosinio. Habria que enviarle copia a Scioli, que a esta altura ya debe tener el c... en remojo. PERO CUANDO FUNCIONE EL TREN BALA, SE ACABAN LOS PROBLEMAS.

  4. Don Petrosino, coincido en lo general con lo que Ud. dice, y me quedo con una frase amarga pero excelente: ¿por qué de la sociedad Argentina va a salir algo mejor que la sociedad Argentina? Siempre creí -y creo- que Maradona es un adalid argentino porque representa el ideal de un porcentaje altísimo de votantes: el vivir lleno de plata virtualmente sin trabajar -porque el fútbol para muchos no es considerado "trabajo"-, haciendo y diciendo lo que quiere y sin rendir cuentas a nadie, corneando a la mujer y de parranda constante. En mi opinión, para muchísimos argentinos, que votan y eligen gobiernos, ése es el ideal. Pero como no lo alcanzan, el mejor sustituto, y los políticos lo saben, está en recibir dádivas, cometas, o abroquelarse a algún poderoso de turno para pasarlo lo mejor posible, siempre sin trabajar. Así son títeres y flotan sobre sus desgracias, quejándose siempre pero por poco tiempo, y de muuuuy de vez en cuando, reaccionando ante algún liderazgo o causa genuina. La diferencia entre el vago que agarra un trapo y te cobra por "cuidarte" el auto, y al que se le paga por temor a represalias, en realidad no tiene sino una diferencia de grados con lo que pasa con individuos como Moreno y sus prohibiciones, que se cumplen a rajatable a pesar que con frecuencia no hay registros físicos de ellas. Por supuesto, en ninguno de los dos casos ninguno de los responsables recibe lo que debería. El por qué de ello es la complicidad derivada de una sociedad mayormente interesada en hacer lo mismo. La mayor parte del pueblo argentino critica a los políticos, pero puestos en su lugar harían lo mismo, no porque sea natural, sino porque estamos enfermos. Los políticos salen de nuestra sociedad, como bien expresó Petrosino, y son reflejo de ella. Si la sociedad argentina no estuviera enferma, después de lo del accidente casi todo el CNRT debería haber destapado la olla y expuesto las denuncias y el estado de los trenes. Schiavi debería haber renunciado. CFK debería haber hablado inmediatamente y suspendido, como mínimo, el servicio concesionado, pidiendo si era necesario ella misma las renuncias. Ninguno lo hizo, porque todos obtienen resultados con que las cosas sigan como están, sea por recibirlos directamente, o para evitar represalias como despidos o pérdida de prebendas. Ahora la "medida sancionatoria" es una absurda intervención de 15 días, que no va a arrojar nada porque en ése tiempo nada puede hacerse y además la documentación sensible ya va a haber desaparecido o habrá sido doctorada. En el ínterin, medirán el termómetro público y verán si conviene rescindir la concesión o dejar las cosas como están. Total, la gente se cansa pronto de quejarse, y además dentro de poco ya tienen TC gratis, fútbol gratis, Tinelli, y subsidios.

  5. Inmejorable descripción de la triste realidad Argentina. Me quedo sin palabras al tratar de pensar cuál será la próxima noticia de este tipo con la que nos desayunaremos.

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